Esta es la crónica del inicio de la Misión con Jóvenes, en la que escuchamos el pregón de Álvaro Macías y los sones de la Agrupación Musical Santa Cecilia.

Casi un año después de la misión desarrollada en el barrio, la parroquia del Santísimo Redentor, nuestra parroquia, reanuda las actividades misionales, aunque nunca las abandonó, para llevar el Evangelio a la calle, en clara muestra de Iglesia en salida que pide el papa Francisco. Ahora lo hace de la mano de los jóvenes principalmente, si bien es tarea a la que está llamada toda la parroquia.

Así lo subrayó su titular, el padre Ignacio González CSsR, en el cierre del acto de apertura de la Misión con Jóvenes, celebrado en el templo parroquial en la noche del Miércoles de Ceniza, significada fecha en el calendario que este año ha coincidido con el 14 de febrero, festividad de San Valentín.

Entre el Miércoles de Ceniza y el 27 de mayo se desarrollará la Misión con Jóvenes con un amplio e ilusionado programa de actividades, cuyo inicio ha tenido neto aroma cofradiero, tan del gusto sevillano, habida cuenta la concurrencia con la fecha de imposición de la ceniza.

Poco después de finalizar en un templo repleto de fieles la misa de las 20 horas, presidida por el padre Pablo Jiménez CSsR, dio comienzo el acto del Pregón de la Misión con Jóvenes. La Agrupación Musical «Santa Cecilia» hizo una entrada solemne en el templo a los compases del canto litúrgico «Hacia ti, morada santa». Esta formación musical, dirigida por don Javier Usatorre, fue fundada el 3 de junio de 2008. Con sus excelentes sones, amenizó satisfactoriamente una velada con sabor cofradiero y misional.

«Aquí estoy», lema de la misión

Dio la bienvenida a los asistentes Miguel Pérez Martín, responsable de Comunicación de la parroquia, quien señaló que bajo el lema «Aquí estoy» los jóvenes del Santísimo Redentor se disponen a llegar al corazón del barrio de Nervión con su mensaje misionero. En esta tarea participarán también los colegios vecinos de Santa Joaquina de Vedruna y de las Salesianas. A Juanlu de Castro correspondió la presentación del pregonero, Álvaro Macías Cruz, a quien conoció en el colegio Santa Joaquina de Vedruna. Realizó una poética intervención, acompañada en determinado momento con el fondo de una marcha cofradiera.

El joven exaltador, Álvaro Macías, que se definió como humilde nazareno y costalero, no tuvo intervención larga, pues tampoco era el caso. Habló del significado de la ceniza y la cruz, así como de la Cuaresma —«tiempo de pregonar que somos auténticos cristianos»— y de la Pasión redentora, a la que calificó de «signo del amor de Cristo». Realizó un poético recorrido por los días de la Semana Santa sevillana y manifestó que su trayectoria cristiana y cofradiera tuvo su origen en el Tiro de Línea, con el Señor Cautivo y la Virgen de las Mercedes Coronada.

Ante la misión que comienza, Álvaro instó a llevar el Evangelio a la calle y al hilo de ello recordó el hermoso lema de su cofradía del Cautivo: «Por un mundo mejor.» Asimismo, pidió que se orara en comunidad, así como se hiciera reflexión en las fechas del tiempo litúrgico de la Cuaresma: «Conviértete y cree en el Evangelio.»

Una vez finalizado el pregón, se procedió al traslado de la Cruz de la Misión por jóvenes y delegados de áreas parroquiales hasta el presbiterio, donde quedó instalada.

Cruz redentorista

Para clausurar el acto, el padre Pablo Jiménez CSsR pidió la presencia en el presbiterio del párroco del Santísimo Redentor, el padre Ignacio González CSsR; los restantes miembros de la comunidad redentorista y delegados de áreas parroquiales. El padre Ignacio ponderó el modo de pregonar que tanto gusta en Sevilla y subrayó que la misión que comienza es de toda la parroquia.

Se hizo entrega de la Cruz redentorista a presentador, pregonero y agrpación musical como recuerdo del acto, que se cerró con la interpretación de la Marcha Real. Hasta el 27 de mayo queda por delante un ilusionado camino misional de jóvenes, pero para todas las edades.